lunes, 27 de agosto de 2018

LA CORNETA,QUEJIDO ANDINO



Por: Laramate Tradición
El cielo se nubla de llanto
El río, aumenta su caudal, enfurecido sigue su cauce
Caminos se revisten de alfombras multicolor
Corneta del pueblo
Corneta de fiesta
Corneta de toro
Corneta de herranza
Corneta de lomas……..
En unos de los relatos de José María Arguedas de sus cuentos. “Agua”, “La muerte de Quilco” nos describe la sutileza de un instrumento andino, aquel quejido andino sin tiempo ……….
En el silencio de la mañana, la voz de la corneta sonó más fuerte y alegre.
Se esparció por encima del pueblecito y lo animó.
A medida Pantancha tocaba, San Juan me parecía cada vez más verdadero pueblo; esperaba que de un momento a otro aparecieran masK´tillos, pasñas y comuneros por las cuatro esquinas de la plaza.

Alegremente el sol llegó al tejado de las casitas del pueblo. Las copas altas de los sauces y de la fachada de la iglesia reflejaron hacia la plaza una luz fuerte y hermosa, la música de Pantaleón hace que lleguen niños, mujeres y adultos; y conforme el sol se levanta, un ambiente de fiesta se extiende por la plaza …….”

En la época de la invasión, el hombre andino fue creativo para lograr mantener sus costumbres evitando a que desaparezcan, las culturas andinas crearon varios formatos de trompetas naturales, aerófonos en el cual vibra a la fuerte presión que ejercen los labios apretados del músico, son naturales por que no poseen mecanismos para modificar el sonido. Los intérpretes de este tipo de instrumento de viento deben usar su destreza para sacar partido de las posibilidades que les brinda la ley física de “armonías naturales”, según este principio de la forma del instrumento y la fuerza con la que sople se obtiene una nota, base tónica y un número variado de sonidos armónicos. 


Según una de las ilustraciones de la obra “Nueva Crónica y Buen Gobierno” del cronista Huamán Poma de Ayala. Los Chasquis, “Correos Incaicos”, avisaban de su presencia, para dar avisos o llamar a cabildos mediante este sonido. Su evolución es de acuerdo a la región. La cultura Chavín, Moche, Nazca del Perú su nombre es “La Caracola o Pututo”, (caracol muy grande), algunos hechos de cerámicas, madera. Cuzco, Apurímac, Andahuaylas, Arequipa, Huancavelica, Huánuco, Junín, Áncash, Ayacucho, Pasco. Con la llegada de las primeras recuas de toros y vacas a tierra americana, el material de este instrumento ancestral fue desplazado por los cuernos de los vacunos, su presencia es muy notoria en el Perú. En el Cuzco se llama Varayuq. “Los que aportan la vara” típicos de los Sikuris al compás del bombo. Se unía el Perú a través del sonido desde la costa hasta la sierra en una frase: “Sonido en el mar, en la tierra”.


Las cornetas adopta la forma de un tubo curvado espiral entre dos a tres vueltas son hechas a base de aprox. 15 a 20 cuernos, donde el tamaño influye en el sonido donde los cuernos de vacas son tonos agudos y los de toro son graves estos son perforados lateralmente o con el pitón cortado, todas las rajaduras interiores para evitar la salida del aire son sellados con cera de abeja, brea, arena y cebo de los animales con tacos de madera y la parte exterior asegurados y ensamblados con tiras de cuero crudo al estar bien secos adquiere firmeza. 

Este instrumento musical fue declarado como Patrimonio Cultural de la Nación por el Ministerio de Cultura, por su importancia en el mundo andino y para su preservación.


Laramate hasta la actualidad conserva y utiliza en diversas festividades “La Corneta”, aquel sonido que estremece cada latido, dueño y protagonista de hermosas temporadas donde se combina sentimientos, naturaleza y tradición.
Entre los meses de Marzo – Abril en medio de inmensos caminos alfombrados, de múltiples colores cual paleta de pintor, se respira la frescura, mientras susurra una corneta, época de Loma atrapados por la magia de la naturaleza es indispensable el bramido telúrico de una corneta a lo lejos, se desplaza el ganado inquieto, tal vez presiente la libertad y la abundancia de un buen año.
“Quejido Andino”, presente en una Herranza, ante el pago a la Pachamama en medio del incesante Huanqueo, “Canto Popular”, mientras se hace el marcado del ganado para identificarlos entre cintas coloridas, celebración más importante del calendario agrícola – ganadero una tradición ancestral de agradecimiento por la fertilidad de la tierra y de los animales.
Como creación del hombre, es la manifestación más original de la cultura andina, principal elemento ritual de aire grave y solemne, que permite anunciar las grandes corridas de toros, melodía dulce que engalana la tauromaquia laramatina ante el asombro de la afición.
Alegría de ganaderos cuando desplazan el ganado al compás de una corneta, una costumbre viva que trasciende de generación en generación, en medio de inmensos campos verde donde el queso, la leche ..... abunda y cada atardecer se agradece con cada tocada donde el eco aliado fiel, trasmite a lo lejos el vibrar de una corneta. 
Cada hijo laramatino se estremece al regresar en el mes de agosto fecha importante, mes de  su gran fiesta patronal se conmueve al escuchar, donde  el llanto se hace presente, reflejando el sentir, producto del tiempo alejado del seno de su amada tierra.
La corneta es uno de los aportes más importantes a la cultura musical ancestral del Perú, siendo indispensable y muy necesario este reconocimiento, es nuestro patrimonio cultural andino.
QUIEN NO LLORÓ CON EL SONIDO DE UNA #Corneta 
SALUDAMOS A NUESTROS MÚSICOS LARAMATINOS:
De Izquierda a Derecha:
Sr.Nicolás SICHA
Sr.Noel GALLEGOS GARAYAR
Sr.Maxe GARAYAR GARAYAR
Sr.Andrés TENORIO GUEVARA

Mención honrosa para: Sr. Gerardo Gallegos Guevara (Q.E.P.D)
                                      Sr. Edgar Poma Garayar








No hay comentarios:

Publicar un comentario